Mientras cocinamos nuestra Salsa de soja sin soja…
Esta salsa nos sirve exactamente para los mismos usos que la salsa de soja, si no queremos o no podemos usar soja. Y nos sirve para hacer nuestros “sofritos” Tándem.
Necesitamos:
- caldo de verduras Tándem. Unos 200 ml (según la cantidad que quieras hacer la salsa)
- jenjibre en polvo.
- ajo picado o ajo en polvo.
- pimienta blanca
- vinagre de Módena sin azúcar (o cualquier otro vinagre permitido).
- un par de cucharaditas de stevia.
- agua.
- sal. (Si el caldo llevaba sal quizás no la necesites).
Ponemos en un cazo el caldo de verduras y lo llevamos a ebullición. Una vez hirviendo añadimos las especias y el vinagre y dejamos a fuego lento que vaya evaporando. Cuanto más evapore: más espesa y con un color más tostado la consigues.
Cuando ya va espesando hay que ir haciéndolo a fuego muy lento y sin parar de mover para que no se nos queme.
Al final añadimos agua para dejarla con la consistencia que queramos, llevamos un momento de nuevo a ebullición y apagamos el fuego.
Al no llevar conservantes la debemos guardar en el frigorífico siempre. Una cosa buena es que si hemos hecho demasiada, la podemos congelar en botecitos y tenerla siempre lista para usar.
Dra. Pérez de Isla.